Y entonces la vida se presenta como un sin fin de acontecimientos que poco a poco van cambiando mis planes... y quien se cree esta vida mía para transcurrir así, sin más, sin permisos ni avisos?
Y entonces me paralizo al borde del camino, y entonces me es inevitable no preguntarme ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Será el destino? ¿Le tengo miedo? Creo que si... o al menos hoy... al menos es ahora cuando estoy sentada esperando al viento... sentada esperando una señal, una respuesta, una explicación.
Ya lo sé... es en vano esperar respuestas. Todo sucede por alguna razón.
¡ Pero como me encantaria encontrar esa razón que así... sin más.... un día cambio mis planes!!
Hoy esta Campanita esta perdida en el Nunca Jamás... y la noche es larga y el sol se tarda en llegar...
"Tengo miedo del futuro...."
Creame, ya somos dos...Pero no hemos de dejar q por ello, el miedo haga de nosotras un problema, y q nos ponga un cortapisas para todo...uno se siente, dice una amiga, como uno quiere sentirse
ResponderEliminarEly... es tan cierto lo que dice tu amiga, uno elige como quiere sentirse. Pero sucede que a veces, ciertas circunstancias de la vida nos dejan como dice Sabina: "En mitad de la calle y desnuda" y es justo ahi.. que esperamos ese viento que tal vez nos arranque del aburrimiento o mejor aún nos de la certeza del camino a seguir. Y entonces, querida Ely, justo en la espera del viento se hace a veces, inevitable sentir un poco de desconcierto y temor... Pero prometo que este este miedo no ha de paralizarnos y seguiremos adelante... porque como dice Ismael: "Hay otro mundo posible!"
ResponderEliminarPolvo de Hadas para vos! y un millón de estrellas que te envuelvan en esos días en que la vida nos deja en mitad de la calle y desnudas!